Evaluación y Tratamiento de la Demencia
La demencia (ahora: Trastornos NeuroCognitivos; antes: Demencia Senil) es algo que muchas familias enfrentan con miedo, dudas y mucha preocupación. Ver cómo una persona querida empieza a olvidar cosas importantes, se desorienta o cambia su forma de ser, no es fácil. Saber lo que está ocurriendo y contar con apoyo profesional puede marcar una gran diferencia en cómo se vive este proceso.
En nuestro centro se realizamos disgnósticos y tratamientos individualizados para adaptarnos a cada uno de nuestros pacientes. No se trata solo de obtener un diagnóstico, sino de entender cómo está su mente, cómo se siente, y qué podemos hacer para acompañarle mejor. Esta evaluación nos ayuda a cuidar, a planificar y a dar pasos con más claridad y menos miedo.
Sabemos que la demencia senil no afecta solo a quien la sufre, sino también a quienes están a su lado día tras día. Por eso también acompañamos a las familias, les damos herramientas, comprensión y un espacio donde no tienen que cargar con todo solos.
¿Qué conseguimos tratando las demencias?
Mejora del bienestar
Nuestras terapias ayudan a conservar las capacidades el máximo tiempo posible, mejorando así el día a día y manteniendo todas las capacidades posibles.
Reducir el impacto en la familia
Ofrecemos pautas y herramientas a los familiares de los pacientes para que tengan técnicas útiles para sobrellevar la situación de la mejor manera posible
Saber qué esperar
Tener un diagnóstico claro permite planificar el futuro mejor, pudiendo adaptarse a los plazos marcados por la enfermedad, consiguiendo mejores decisiones.
¿Cómo realizamos las terapias en las demencias?
Evaluación inicial
Diseñamos un proceso de terapia
Realizamos estimulación cognitiva
Formamos a las personas que acompañan al paciente
Realizamos el seguimiento y adaptamos la terapia
Preguntas frecuentes
¿Cuál es la diferencia entre demencia senil y otras formas de demencia?
Las demencias (Trastornos NeuroCognitivos) pueden originarse debido a diferentes tipos de problemas de salud. Entre las demencias más comunes se suelen encontrar el Alzheimer, la Demencia Vascular o la Demencia Frontotemporal, ¡pero estas no son todas!. Todas ellas tienen diferencias entre sí y el tratamiento que ofrecemos está individualizado para cada uno de los pacientes basándonos en la evaluación previa.
¿Cuáles son los primeros síntomas que pueden alertar de una demencia?
Los primero y principales síntomas que nos muestran que se puede estar padeciendo algún tipo de demencia son los olvidos frecuentes, la desorientación, el cambio en el carácter, la dificultad al hablar o las confusiones con situaciones cotidianas.
¿Qué es la demencia vascular y cómo se diagnostica?
Es un tipo de demencia que ocurre por una alteración del flujo sanguíneo en el cerebro, generalmente tras pequeños ictus o accidentes cerebrovasculares. Los neuropsicólogos realizamos terapias que ayudan a que los pacientes mantengan lo máximo posible su independencia.
¿En qué se diferencia la demencia frontotemporal de otras demencias?
Normalmente, este tipo de demencia suele afectar primero a la conducta, las emociones y el lenguaje. A diferencia de otros tipos, la memoria es una de las últimas capacidades cognitivas que pierde el paciente
¿Qué papel tiene el entorno familiar en el proceso de terapia?
El entorno familiar es uno de los principales factores que determinan el estado en el que se encuentra el paciente y su evolución a lo largo de la enfermedad. Si las familias realizan un buen trabajo de acompañamiento, se puede reducir la velocidad en la que la enfermedad avanza. Por ello, desde nuestro centro siempre planteamos un pequeño proceso de formación (psicoeducación) a las familias para ayudar a lo largo del proceso de terapia.
¿Qué tipo de tratamientos existen para la estos padecimientos?
Actualmente, no hay ninguna cura segura para este tipo de enfermedades. No obstante, se puede reducir la incidencia de la enfermedad con procesos de terapia neuropsicológica, cognitiva y emocional. Además, el uso de medicación específica y un buen acompañamiento por las familias mantienen lo máximo posible las capacidades de los pacientes
¿Las demencias se pueden prevenir o frenar con hábitos saludables?
Mantener buenos hábitos de alimentación y actividad física permiten reducir la posibilidad de padecer este tipo de enfermedades, o al menos atrasar la aparición de las mismas. De manera general, se ha comprobado que problemas de hipertensión, colesterol, diabetes y llevar una vida sedentaria favorecen la aparición de la demencia.
¿Cuándo se debe acudir a un profesional? ¿Cuándo se empiezan a ver síntomas?
Lo ideal es acudir cuanto antes. Normalmente, los primeros síntomas notables de la enfermedad son los cambios en la memoria (despistes u olvidos), conducta o lenguaje, por lo que si apreciamos en algún familiar este tipo de cambios deberemos acudir al profesional. Un tratamiento temprano de las primeras señales de la demencia pueden ayudar y retrasar el avance de la enfermedad.
¿Qué tipo de apoyos se recomiendan a los pacientes?
Recomendamos realizar rutinas claras a lo largo del día, tener un acompañamiento emocional continuo, un proceso de estimulación cognitiva adaptada al nivel de incidencia que tenga la enfermedad y de ser necesario una ayuda a las tareas diarias que no puedan realizar de manera autónoma.
Contacta con nosotros
Nunca es tarde para centrarte en tu Salud Mental ¡Te esperamos!
